xoves, 22 de decembro de 2016

De culo

Pues así está. Sorpresa. Sentado. Que puede dar mil vueltas hasta el día del parto. Bien lo sé. Hasta el final. Pero es el final el que da miedo. El protocolo actual de la SEGO (la SEGO es la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia) es atender partos de nalgas, más complicados que los de cefálica, sí, pero menos arriesgados que una cesárea. Parir solo se desaconseja en un puñado de casos. Por desgracia, a día de hoy, pocos ginecólogos saben atender estos partos. Y es que hace años se presentó un estudio que proclamaba la cesárea como opción más segura. Así pues, la mayoría de facultativos paaron a la cirugía. Las nalgas se dejaron de atender y, aunque en la actualidad está demostrado que el estudio es erróneo, pocos son los ginecólogos que saben acompañar estos partos. En mi hospital de referencia suponen cesárea programada a lo largo de la semana 39 de gestación. El final. ¿Hacer turismo obstétrico buscando un hospital con gines formados? ¿Aceptar aquí una cesárea pero sin programarla? Por el contrario, ¿programarla? El final de unas nalgas es un aumento del riesgo de prolapso de cordón. Y si esto sucede en casa no hay ambulancia que teleporte hasta una mesa de quirófano. Aún quedan semanas por delante para girarse una y mil veces en mi útero multíparo donde a las 40 semanas, 4 días, 3,5 kg y el poco líquido amniótico de los finales de embarazo, se desencajó una niña. Quedan las posturas, la acupuntura, la moxibustión. Queda la versión externa. Queda confiar en lo imposible: en el final...
 
De cu
Pois así está. Sorpresa. Sentado. Que pode dar mil voltas ata o día do parto. Ben o sei. Ata o final. Pero é o final o que dá medo. O protocolo actual da SEGO (a SEGO é a Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia) é atender partos de nádegas, máis complicados que os de cefálica, si, pero menos arriscados que unha cesárea. Parir só se desaconsella nun feixe de casos. Por desgraza, a día de hoxe, poucos xinecólogos saben atender estes partos. E é que hai anos se presentou un estudo que proclamaba a cesárea como a opción máis segura. Así pois, a maioría de facultativos pasaron á cirurxía. As nádegas deixaron de atenderse e, aínda que na actualidade está demostrado que o estudo é erróneo, poucos son os xinecólogos que saben acompañar estes partos. No meu hospital de referencia supoñen cesárea programada ó longo da semana 39 de xestación. O final. Facer turismo obstétrico buscando un hospital con xines formados? Aceptar aquí unha cesárea pero sen programala? Polo contrario, programala? O final dunhas nádegas é un aumento do risco de prolapso de cordón. E se isto sucede na casa non hai ambulancia que teleporte ata unha mesa de quirófano. Aínda quedan semanas por diante para xirarse unha e mil veces no meu útero multíparo onde, ás 40 semanas, 4 días, 3,5 kg e o pouco líquido amniótico dos finais de embarazo, se desencaixou unha nena. Quedan as posturas, a acupuntura, a moxibustión. Queda a versión externa. Queda confiar no imposible: no final...

2 comentarios:

  1. Hola guapa..que paso con tu parto?yo estoy de 32 semanas y mi bebe esta sentado. Es mi tercer hijo y nunca he tenido cesarea y no la quiero ni ver.Espero que todo te saliera bien.

    ResponderEliminar
  2. ¡Hola! Pues finalmente el peque se giró hacia la semana 36 y nació sin ningún problema ni intervención. Lo puedes leer aquí: http://maternario.blogspot.com.es/2017/07/parto-vaginal-despues-de-cesarea-en-t.html
    Yo tenía pensado solicitar la versión externa y también había elaborado un plan de parto, por si acaso, aunque en mi hospital de referencia iba a ser complicado que alguien me quisiese atender. También barajé la opción del turismo obstétrico, porque hay hospitales donde sí atienden nalgas. ¡Mucha suerte!

    ResponderEliminar